Compartir
Stumble Upon

martes, 1 de octubre de 2013

Martes

A la expectativa. Hoy me siento así, bueno ¿Será por qué me siento amenazada? O será porque estoy esperando algo constantemente, qué en definitiva, no sé. Lo que sí sé es de quien proviene, de ella. Obvio. Ya es normal que aunque tenga responsabilidades y tareas que cumplir siempre me sienta en una nube, una nube puesta encima de mi amor. Donde la miro desde arriba, no porque me sienta superior, nada de eso, sino porque me siento lejos, lejos y restringida, como si yo misma fuese una ilusión óptica, alguien que jamás ella podría ver. No era así, claro que podía, en realidad, no lo hará porque no quiere, supongo. O porque no tiene porque hacerlo. Eso es mejor, menos desalentador. Trato de calmarme, no me hace bien vivir esperando que nada empeore, ahí me di cuenta, es eso lo que espero, que nada empeore, que todo siga así. No quiero volver a lo mismo, quiero sonreír sabiendo que existe la posibilidad, esa posibilidad que siempre existe en realidad, pero la veo más cercana cuando las cosas están como están y nada más. Podría seguir escribiendo, horas y horas relatando como me siento, pero es una estupidez, tengo cosas que hacer, como terminar el libro que rindo mañana por la mañana o no sé, ordenar mi habitación, algo más productivo, alguna tarea quizá, pero no. No me puedo desprender de esto que ahora es para mí nuevo, querer dejar constancia de como el amor va alterando mis días, mis horas, mi todo, en sí. Hoy por ejemplo falté al colegio, amo ir, amo estar con mis compañeras, además no tengo faltas. Pero falte ¿Por qué? Porque no me sentía feliz, algo había perturbado mi hermosa tranquilidad, ya no me sentía segura. No, algo lo había cambiado todo y como no me gustó no quise salir de la cama. Me levanté a eso de las once porque mi mamá me pidió ayuda, ahí pude dar a conocer mi mal humor al resto de mi familia, después se fue, de a ratos vuelve, ahora no, ahora estoy bien, esperanzada otra vez. Soy toda una idiota. Hace un rato leyendo a Benedetti  leí que el personaje decía que su pareja era 'digna de la verdad' y me gustó eso ¿Seré yo digna de la verdad algún día? Me hizo también prometerme a mí misma que iba a hacer sentir a mi amor digna de la verdad siempre (ya estaba haciendo planes otra vez). En el único momento que logré por fin dispersarme un poco fue hoy a la tarde, con mi mejor amigo, lo extrañaba tanto! Volvió de Bariloche, hablamos bastante, me eligió como pareja para entrar a su recepción, lo que me pone feliz, pero obligada a comenzar una dieta, comenzar a tomar sol, salir a mirar vestidos, zapatos, pensar en varias cosas porque así soy y bueno... De todos modos cuando volvía caminando sola me imaginaba super producida para la ocasión y que mi amor esté ahí, mirándome diciéndome lo linda que me veía o algo así (patética siempre). En fin espero que mañana sea mejor, en realidad quiero que ahora mismo, mi noche de un giro mortal. Odio dormirme con la sensación de que algo anda mal. La odio, la detesto y más cuando venía sintiéndome tan bien. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario